En la iglesia, después del seminario, los oradores ("T" y "J") se sentaron en el banco inmediatamente frente a mi familia. Mi esposa dijo que estaba oliendo una fragancia muy hermosa. Ella dijo que esta fragancia no era de hombre o mujer. En varias ocasiones durante la Misa el olor fue más fuerte. Y descubrió que el olor provenía de "T" y "J" y cuando se movió, la fragancia llegó hasta ella. ¡Me sorprendió, porque ni mis hijos ni yo pudimos esta fragancia! Mi esposa me dijo que cuando recibí la Sagrada Comunión el olor era más intenso. Una semana después, tuve la reunión del grupo de oración en la casa de mi madre. Discutimos la experiencia del Seminario y una de las damas que asistieron a la reunión, llamada Alma, que estaba sentada en la iglesia en un banco frente a "J" y "T", nos dijeron que también había olido la fragancia que fue muy exquisito como una especie de fragancia de aceite Esto es para mí, una confirmación de lo que mi esposa olió ese día. Dios los bendiga a todos. No hay duda de que Dios bendice y brinda protección a sus siervos "J" y "T".
La experiencia no se compara con ningún retiro al que haya asistido. La cercanía de la hermandad y todo lo que experimentamos allí se mantiene en nuestros corazones. Somos una gran familia que Dios ha reunido. - CG
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